Vacía, como de ausencia de aire,

tu vida es.

Doliente, como en el tiempo presente,

la herida es.

 

Hay lágrimas visibles que humedecen tu piel,

hay lágrimas que caen dentro, y que no se ven.

 

Valiente, porque construyes tus días,

con lo que quedó de tu ser.

Paciente, porque esperaste de otros,

lo que no pudo ser

 

Hay momentos en la vida, de plena felicidad,

hay mojones, que el tiempo construye, donde se respira paz.

 

Pájaro de alas rotas, no te quedes allí,

a curar tus heridas al sol.

Camúflate, con el color de los árboles,

mimetízate, con el sonido y el aire.

 

Vuélvete inalcanzable, que desapercibido, también se vive,

y cuando estés plenamente recuperado, échate a volar.